La historia de esta década
y el espasmo que produce el callarla
se vuelven combustible en mi guadaña
son uvas negras que se abren en mi lengua
que el músculo y la piedra guardan in memoriam
para el placer dormido entre mis brazos
silencio trabajado en yeso recubierto
en caramelo que revela solo para mí
el torso que he callado
el mismo del cual hoy
en su dulzor de piel
yo no querré jamás
hacerme
responsable.