jueves, 19 de diciembre de 2019

Sobre la normalización de los estados extremos


Cuando la guerra dura tanto
deja de ser lo opuesto de la paz
Toda forma de renacimiento
se vuelve cotidiana al extenderse
como cuando frenéticos
agotamos la carne y amanece
dejas de ser lo opuesto del odio
y vamos lúcidos montando tormentas
Éste es mi cuerpo Amor y éste es el tuyo
animales que se retan a duelo y sus rigores
pues no saben otra forma de conciliar el sueño.