jueves, 25 de julio de 2019

El abrazo de un acuario


A medida que la fiebre
marca de Caín entre las cejas
se extendía
mi motor se diluía en el acuario
como el azúcar negra
las carreteras de cardumen empujando
cabezas de naranjas examantes
ahora anclas y cerrojos yo deseaba
más entre el pavor la tos de pecho
saltar las páginas
no estar enfermo
alternaba entre los clásicos un playlist
de terapia
country leviatán y ruido blanco
perdía así contacto con los hilos
de la tierra que son náusea
son memoria
ésta fue mi bienvenida Arco de Hielo
Ruleta Mía de pistones y peceras
llévame en tus cañones hospitales
me dejaré como quien ve correr la muerte
aproximándose a través de las paredes
y se recuesta al otro lado de la cama
esperando
abrazo tierno.